Nieve

Qué semanita, por favorrrr!!!
Me mudo, conseguí trabajo (dos, mejor dicho), entregué mi proyecto de investigación y, para coronar una semana a full... HOY NEVO!! Mi felicidad era tal que me puse el sombrero, los guantes y me fui a caminar por las calles parisinas. Hace muchisimo que no veia nieve, paradojicamente, ya que mi infancia y adolescencia transcurrieron en ella... en un pueblito de la Cordillera de los Andes.
Aunque siempre fue asi, si bien estoy acostumbrada a ver nevar, cada vez que nieva, soy feliz, es como una sabana blanca que purifica, un frio que limpia, un color que unifica, un silencio hermoso porque, no se si notaron, pero los sonidos son muy diferentes.
Me acuerdo en mi casa, cuando era chiquita, que con mis hermanos saliamos al jardin, nos parabamos uno en cada punta (uno en el manzano al lado de "la bajadita" y yo en mi araucaria), hablabamos bajito y nos divertiamos descubriendo que nos escuchabamos.
Hay muchas cosas que me emocionan y me hacen llorar - o casi. Situaciones, frases, imagenes que me atan un nudo en la garganta y no puedo hablar. El corazon me late muy fuerte y quiere salirse.
Hay veces que desearia ser menos sensible para que determinadas situaciones me golpeen menos pero no, soy demasiado vulnerable.
Ufff, me fui por las ramas, queria poner que hoy caminando bajo la nieve, era tal mi felicidad que no podia disimular mi sonrisa y se me congelaban los dientes. La gente me sonreia porque se ve que era bastante contagiosa mi alegria! La ultima vez que me paso eso fue la primera vez que camine por Paris, los primeros dias.
Despues me volvi a emocionar, un rato mas tarde, con el relato de Willy Ronis, 95 años, fotografo frances que expone en el Hôtel de Ville. Contaba su vida y en un momento dice: "lo unico inesperado es la vejez. Mis ultimas fotos son de 2001, despues, con el baston, ya no era lo mismo, ya no puedo salir a caminar, me duelen las piernas, me canso y, sobre todo, no puedo sacar mi camara". Una vez mas, nudo en la garganta.
Yo, por lo pronto, disfruto de mi energia y salgo a caminar bajo la nieve.



PS. Cuando el bendito cable USB decida volver a funcionar, posteo fotos.